Es frecuente observar que cuando hay algún miembro de la familia que tiene un trastorno por uso de sustancias (TUS), no necesariamente es el único, sino que varios familiares también pueden padecerlo, lo que nos lleva a pensar que existe un componente genético asociado al consumo de sustancias. La adicción a sustancias o TUS es una enfermedad cerebral caracterizada por una búsqueda compulsiva por una sustancia y su consumo, a pesar de las consecuencias negativas personales, familiares, laborales y sociales que conlleva su uso. ¿Quién puede desarrollar un TUS? Uno podría pensar que aquellos que son hijos, por ejemplo, de padres alcohólicos; sin embargo, no necesariamente: cualquiera puede desarrollar un TUS. El mayor factor de riesgo para desarrollar un TUS es consumir una sustancia de abuso.
El TUS es un rasgo complejo que depende de factores genéticos y ambientales. Se reconocen algunos factores de vulnerabilidad, y la genética representa uno de tantos. Estudios con gemelos han permitido calcular la heredabilidad para el TUS, que depende, en parte, del tipo de sustancia. La heredabilidad es la proporción de la variabilidad en la expresión de un rasgo en una población que se puede atribuir a factores genéticos; este índice puede adquirir algún valor entre 0 y 1; mientras más cercano a 1, la variación en la población se debe a la variación genética. Por ejemplo, en poblaciones con ancestría europea se ha calculado una heredabilidad que va desde 0.39 para alucinógenos, 0.5 para alcohol y cannabis y hasta 0.72 para cocaína. En nuestra población se desconoce cuál es la heredabilidad para el TUS de cualquier sustancia y es una de las múltiples preguntas que busca responder TwinsMX.
Esta variabilidad en la heredabilidad para el TUS, particularmente de psicoestimulantes, opiáceos, alcohol y tabaco, está asociado también con rasgos de personalidad, como la búsqueda de sensaciones (deseo por buscar experiencias nuevas y variadas a través de los sentidos), búsqueda de novedad (preferencia por un estilo de vida de novedad o variedad, exploración de lugares extraños, viajes no planeados) e impulsividad (tendencia para responder de manera prematura, pobremente planeada y sin considerar las consecuencias adversas). Para la búsqueda de novedad se ha calculado una heredabilidad de 0.6, mientras que para la impulsividad, de 0.33. Tampoco conocemos cómo es la heredabilidad para estos rasgos en nuestra población, pregunta que también queremos estudiar en TwinsMX.
Estudios de asociación de genoma amplio (por sus siglas en inglés, Genome-Wide Association Studies, GWAS) han detectado hasta 3927 marcadores, conocidos como polimorfismos de un solo nucleótido (variantes genéticas en una de las cuatro letras del ADN, adenina, timina, guanina y citosina, en un sitio específico) asociados al consumo de sustancias que se encuentran ubicados a lo largo de los 22 cromosomas autosómicos. De estos marcadores, el 8% sólo se han asociado a consumo de sustancias diferentes a alcohol y tabaco. Esta falta de conocimiento asociada a drogas diferentes a tabaco y alcohol, podría deberse en parte por la menor frecuencia de consumo de otras sustancias y por el estigma asociado a su consumo. Estos GWAS también han confirmado algunos genes candidatos como aquellos asociados al consumo de alcohol (por ejemplo, en el gen que codifica para la enzima alcohol deshidrogenasa o la aldehído deshidrogenasa), aquellos involucrados en el sistema de motivación-recompensa (por ejemplo, en el gen que codifica para los receptores dopaminérgicos D2 y D3) y el consumo de tabaco (genes que codifican para el receptor nicotínico). También, estos estudios han podido detectar asociaciones específicas de variantes genéticas puntuales para el consumo de drogas en particular.
La relevancia de conocer estos marcadores es para entender mejor los mecanismos neurobiológicos que subyacen al consumo de sustancias, el desarrollo de un TUS y sus potenciales efectos en la respuesta a tratamiento.
¡Participa con nosotros! Si eres gemelo, cuate, trillizo o más, ayúdanos a entender sobre el consumo de sustancias en nuestra población!
Dra. Alejandra Evelyn Ruiz Contreras
Laboratorio de Neurogenómica Cognitiva
Facultad de Psicología, UNAM